LEJOS DEL LABERINTO
Es tu oficio
romper del silencio la niebla
poner palabras en el vacío.
Contra la losa de los siglos
mil manos
martillean el espacio.
Corazón tendido sobre la noche
trabajadora del verso
tu soledad
en el poema
rindió las armas.
El poema es Ícaro huyendo con sus alas del laberinto
su ascensión hacia el sol hasta no poder más.
El poema es Ícaro entregando su grito a la tierra.
Es la tierra abriéndose tierna
para que el loco volador
ampare para siempre su caída.